La corrupción es algo generalizado desgraciadamente y algo de lo que son
sospechosos todos los que tengan capacidad de gestionar cualquier tipo de
recursos, económicos o de otro tipo.
Generalizar la corrupción sería totalmente injusto. En ningún ámbito
podemos generalizar la excepción.
¿Cuándo es susceptible de generalización? Pues simplemente cuando esa corrupción
ha servido de sustento para el mantenimiento de determinados tipos de política y
cuando ese tipo de actos sea denominador común de las acciones o santo y seña
de su razón de ser….en la mayoría de las ocasiones como herramienta para
sostener su sistema clientelar.
Lamentablemente vivimos en una sociedad en la que los corruptos, mientras
puedan comprar apoyos, marcan los tiempos en muchas de las cuestiones
importantes o principales en las que se sustenta el sistema.
Afortunadamente también, esa guerra por el poder, genera contrapartida,
el otro lado, el otro polo… es en realidad nuestro aliado todo ello sin tener
que diferenciar entre polo negativo o positivo, está claro que cada cual atrae al
suyo y repele contrario…puro magnetismo y aunque el final sea el mismo, poco a
poco van desapareciendo las caretas y a ambos lados se les hace mas difícil
atraer a sus iguales….simplemente porque no quedan iguales a los que regar o
agua para regara los iguales.
Imaginemos por un momento que salta la noticia de corrupción generalizada
y multimillonaria de alguna organización, es decir, que esa o esas
organizaciones se han lucrado ilícitamente del dinero púbico para comprar “adeptos”
Además imaginemos que esa o esas organizaciones defensoras de los que en el pasado realizasen acciones (como la de contratar las podas)….¿creéis que tienen legitimación
alguna para dar lecciones?....aquí dejamos la reflexión…continuara….