Ahora que se acercan las elecciones sindicales observaremos las metamorfosis sindicales…todo sea por un buen puñado de votos.
La respuesta a la aparente memoria volátil podría estar en un tema más social que sindical…la inmediatez, la felicidad instantánea…pero analicémoslo desde una perspectiva de tipología de afiliados…que existen en todos los sindicato y que nosotros los dividimos en tres.
Tenemos al afiliado sentimental…ese que mantiene su fidelidad a unas siglas por mucho que estas carezcan en absoluto de fidelidad a sus ideas históricas, al menos en Tussam. Este tipo de afiliados suelen mantener la afiliación, aunque su voto es variable, eso sí, también suele ser poco analítico y dejarse llevar por el tema del momento para decidir…presa fácil de esos sindicatos desalmados que se disfrazan de guerrilleros cuando en realidad suelen ser unos tuercebotas de marca mayor.
El segundo tipo es ese afiliado que podríamos denominar como “fanático” y que normalmente fue captado por una acción determinada o concreta autogenerándose una fidelidad por agradecimiento que en la mayoría de los casos contraviene sus intereses, pero que están dispuestos a venderse al mismísimo diablo para defender esas siglas, aun sin fundamentos y negando las evidencias más claras. También suelen ser tipos “anti”, que suelen tener animadversión por el resto del elenco sindical o por parte de este. Evidentemente este tiene su voto decidido, bien sea por agradecimiento o por animadversión otros.
Por último tenemos a ese otro afiliado que es analítico y para el que es más importante el dato, que el relato, una tipología de afiliados que normalmente son pacientes cuando escuchan de su sindicato determinadas justificaciones relatadas y sin contrastar con datos, pero que suelen dirigir su voto a quienes demuestran con datos y acciones lo que dicen. Sin desmerecer al resto, estos son los que suelen estar más acertado a la hora de depositar la papeleta…sencillamente porque son mas objetivos sin dejarse llevar por relatos de terror o de portera del bajo…un sencillo: “¿y eso donde está escrito?”…suele desmontar al “relator del cuento”.
Dejando a un lado los tres tipos de afiliados, no podemos pasar por alto eso de que la sociedad actual está muy acostumbrada a la inmediatez y a las explicaciones cortas… esto dificulta sobremanera, especialmente cuando el relato sustentado en el dato conlleva una explicación extensa y compleja…por eso de que es más fácil mentir al grupo que convencerlos que están siendo engañados…de ahí que es complicado encontrar sindicatos que estemos dispuestos a perseverar y convencer con datos que esos otros que se han tirado descaradamente en brazos de la mentira, la manipulación y la desvergüenza.
En los próximos meses veréis el baile de mascaras, fácilmente detectables con solo dar unos pasos a hace poco menos de tres años atrás: a la negociación del anterior convenio…en nuestro blog podréis encontrar la información clara y documentada de lo que paso…contrastarlas con las del resto (¿¿??)…¿mismas personas?...si, así que alguien miente descaradamente…¿no veis?...aun quedan tres meses…id echándole un vistazo tranquilos y observar las señales…se caen las caretas.
