Al
haberse detectado problemas por posibles picaduras de insectos a los
conductores, hemos solicitado a la empresa que ponga en marcha la campaña desinfección
periódica que siempre se ha realizado.
Al
parecer existen informaciones oficiosas sobre que la empresa hace tiempo que
dejo de realizar estas operaciones. Evidentemente no vamos a dar por buenas, a
priori, las mismas ya que entendemos que sí así fuese se estaría incurriendo en
imprudencia manifiesta en materia de Prevención de Riesgos Laborales, por lo que
no creemos que se trata de uno de los habituales bulos.
En
cualquier caso hemos insistido a la empresa que la ponga en marcha de nuevo, reiterando
que continuéis mandándonos cualquier anomalía que detectéis.
Al
margen de esta cuestión y motivado por el nuevo modelo de venta de billetes
on-line, la empresa se ha visto obligada a inutilizar de manera temporal las
canceladoras externas. Al margen de esos errores, nos parece inaudito que las
canceladoras carezcan de la memoria interna suficiente para procesar este
volumen de datos, sobre todo porque al parecer cuando se adquirieron lo
hicieron, al parecer, con unas características diferentes de los dispositivos
que finalmente llegaron, actuación que parecía demasiada extendida, no sabemos
se intencionadamente o no, en la época en la que el alopecico pululaba por las
plantas noble de la empresa
No
cabe duda que esa irregularidad debería de tener su respuesta jurídica, aunque
no somos nosotros los que podríamos tomar esa iniciativa.