En el día de ayer, tuvimos la oportunidad de probar el nuevo vehículo hibrido
que hemos recibido recientemente en las instalaciones de Tussam. Lo hicimos
junto a un técnico que se va a encargar de poner en servicio el mismo antes probarlo
en línea.
Ya, En las últimas comisiones de compra,
pedimos que a los miembros de la Comisión de Compras pudiésemos probar los
diferentes modelos de vehículos que iban llegando para poder hacer una
valoración más efectiva de ellos, algo que no se había hecho con los anteriores
vehículos en pruebas, por lo que no podíamos valorar su funcionamiento, sobre todo siendo esta comisión tan importante
en la gestión de una buena y efectiva compra.
El vehículo nos ha sorprendido gratamente a nivel de funcionamiento, dedo que al ser un hibrido nos suscitaba
ciertas reticencias con respecto a su efectividad en materia de motor y las respuestas
de éste.
Se ha podido comprobar que en caso de potencia y respuesta este vehículo está
muy conseguido, si bien planteamos a los técnicos la necesidad de mejorar la
respuesta en los primeros 15 metros, ya que después de estos el coche se mostro
sobrado incluso desde parado en las pendientes más fuertes que podamos tener,
como el puente de las Huertas o la entrada en Luca de Tena dirección Heliópolis.
A nivel de frenada, es un vehículo que está muy conseguido, su
frenada es muy suave y progresiva. El funcionamiento de este se basa en la interacción
de los propios motores eléctricos para reutilizar la energía de la frenada en
la recarga de la batería. Los primeros metros de la frenada los realiza con los
mismos, de ahí esa suavidad y tacto de estos. Sí hemos encontrado una pega a
este nivel, aunque no supone en cierta manera un fallo como tal, que es algo
que podríamos mejorar, nos referimos a la transición que el propio vehículo
hace desde “retardador” eléctrico al propio freno mecánico, momento en el que
la suavidad y tacto pierden en cierta manera su suavidad y progresividad. Cierto
es que esto ocurre ya a muy baja velocidad, pero entendemos que es algo a
mejorar.
Otras de las cuestiones que podríamos destacar
es la celeridad en el cierre de puertas. El sistema de seguridad que mantiene
el vehículo frenado mientras mantiene estas abiertas es muy poco intrusivo, es decir,
suelta el freno de manera casi instantánea una vez ambas hojas de puertas
encajan, lo que posibilita una salida de parada suave y sin tirones.
Por otra parte tenemos que mencionar el
tema del asiento. Ante el empeño de algunos en probar lo que a todas luces esta
mas que probado, como así se constato en la visita de los Delegados de Prevención
a la EMT de Málaga, para verlos in situ, en este vehículo se ha instalado el asiento de
“felpa”.
Como no cabe duda, porque nunca se ha
cuestionado en este sentido, el asiento en sí es muy cómodo a nivel ergonómico,
pero como hemos esperábamos y se preveía, no está acondicionado para poder
trabajar con él en esta ciudad, debido a las altas temperaturas.
Tras un par de horas conduciendo el
vehículo, la camisa y el pantalón estaban completamente empapado y eso teniendo
en cuenta que el vehículo lo hemos probado durante las primeras horas de la
mañana, es decir que la temperatura no era para nada alta, dato a reseñar por
su ineludible comparativa en relación a las horas centrales o a que diferentes
compañeros que se hayan sentado en el. También reseñar que su regulación requiere
de cierta adaptabilidad debido a la cantidad de reglajes que tiene, algunos de ellos
de poca eficacia o poco funcionales.
Centrándonos y para finalizar en el tema
de equipamiento, solo indicar que este es similar al del resto de vehículos que
están viniendo y como es normal con los diferentes detalles que hay que modificar
en relación a ubicaciones o dispositivos que en materia de prevención de
riesgos laborales ya se irán corrigiendo una vez la propia Comisión realice el
habitual informe.