martes, 23 de septiembre de 2014

VERDADES Y MENTIRAS (MARCA ACME)

No cabe duda de que cuando existe un enemigo de entidad, aunque se le minusvalore a lo según ellos tienen una representativamente residual,  se pone toda la carne en el asador para intentar derribarlo, aunque sea a costa de mentiras, contradicciones y medias verdades.
Esto tipo de actuaciones es de común aplicación a determinadas organizaciones que simplemente buscan del sindicalismo la compra-venta de favores, eso sí, de uso exclusivo y aplicándoles otro denominativo más rimbombante: DE CLASE.
No cabe duda que las denominaciones tiene que estar avaladas por hechos, que no puede hablar de honestidad aquel que es deshonesto, que no puede hablar de prebendas el que vive de ellas y que no puede hablar de representatividad real aquel que es incapaz de movilizar a sus propios afiliados…más aun…que no puede hablar de defensa de los derechos cuando solo ellos han sido los culpables de haber dilapidado todo lo que sus antecesores…a contrario que los actuales esos si estaban realmente apoyados por los afiliados y no por números comprados con acciones clientelares (cursos, enchufes y demás) …consiguieron con lucha real.
La defensa de clase no se puede llevar a cabo desde las imposiciones, a costa de dar a unos quitando a otros, en cualquier caso deberían ser los trabajadores los que decidan esta máxima, de ninguna manera puede venir impuesta por nadie…eso se llama libertad de elección, algo que a algunos le viene grande.
En el momento que una organización hace una valoración negativa de los derechos laborales se convierte de manera automática en una organización amarilla, no corporativa si no amarilla en todo su contexto más amplio ya que hacen suyos los argumentos más rancios de la paleolítica clase empresarial española, lo que nos lleva a determinar que posiblemente se refieran a la defensa de “esa clase”.
Está claro que quien mucho abarca poco aprieta y quizás el modelo de coordinación de organizaciones sindicales se esté demostrando más efectivo que el modelo piramidal de una sola estructura, a los hechos nos remitimos.
La lucha independiente de los trabajadores sindicados en organizaciones ajenas a los monstruos es más efectiva a tenor de las loas que reciben por parte de los aludidos…es evidente que hay casos y casos, pero normalmente suele ser más efectiva en el entorno en el que se mueven, entre otras cosas porque conocen la idiosincrasia de dicho entorno y no vienen desde afuera con claras directrices de sobre que, como y cuando hay que firmar los acuerdos.
Otra de las cuestiones que, al margen de lo anterior, hace que los sindicatos “de clase” teman a los pequeños, corporativos o como quieran llamarnos es el hecho de que consigan representatividad suficiente para poder está en las mesas sectoriales de negociación, esa mesa donde tienen la mamela y de la que nacen mas acuerdos favorables a sus estructuras que a sus representados, casualmente esa mesa de la que excluyen a esos sindicatos que meten en el saco de “su clase” pero que a todos los niveles están a años luz, en todo y por todo, de ellos mismos, de hecho están más cercanos al sindicalismo independiente y directo que de ellos…casualmente algunos de las organizaciones a las que aluden son participantes activos en la CST, junto con sindicatos de “no clase” como ellos dicen , lo que demuestra que están muy alejados de la realizad obrera de este país, al menos mas que algunos.
Otras de las hipócritas mentiras que, a nuestro modo de ver, por supuesto no es dogma aunque bien podría serlo y por lo tanto correríamos el riesgo de parecernos a ellos en demasía, es la de hablar de los efectos positivos de la inflación sobre los trabajadores, de justicia social y sin embargo ser enemigo acérrimo de las subidas lineales….¿dónde está el truco?...¿a quién quieren engañar?.
Las incongruencias informativas están más que demostradas cuando hablan que los sindicatos profesionales o corporativos solo funcionan en colectivos determinados y “poderosos”, entre los que incluyen a los periodistas, llevando el tema en contrario sobre las precarias condiciones de este colectivo…¿acaso los periodistas son idiotas o es que lo son ellos?...está claro que tratar a la gente de tontos es el deporte nacional de algunos y así les va.
El cinismo, rayano en la desvergüenza más absoluta, llega cuando intentan confundir derechos con prebendas y vincularlos al sistema clientelar que ellos siempre han practicado, extendiendo la “especial” condición de FETICO,  a todos los sindicatos independientes…¿Por qué estos dicen públicamente en este enlace otra cosa?...¿tendrán algo que decir de lo que recoge este enlace?...imaginamos que todos esto sinvergüenzas estarán fuera de sus estructuras a tenor de estas actuaciones que según ellos son motivo más que suficiente para su “inmediata expulsión”….¿conocéis la aplicación estatutaria de expulsión de algún golfo?...lo que sí está claro es que los transparentes si utilizan la vía estatutaria que sea para amenazar al que quiera tirar de la manta..leed esto.

Terminamos dejando claro que un sindicalista que se precia no puede ni debe criticar las condiciones laborales que los trabajadores hayan conseguido con su presión u organización independientemente de la organización que lo pivotase, sobre todo siempre que estas condiciones no vayan en detrimento de otros colectivos, algo que usualmente ellos practican. Sobre todo no se puede hablar de prebendas o de los tiempos de crisis para criticar el uso de un derecho cuando se accede a subvenciones millonarias de difícil justificación y a tramas de presuntas corruptelas para su financiación adicional a las “oficiales” , pero sobre todo quedan desautorizados de facto si ojeamos el enlace que aquí exponemos…no cabe duda que la demagogia da mucho juego, pero la información apoyada en hechos contrastados solo da la pelota a quien de verdad sabe jugar, no a mentirosos compulsivos.