Aunque carecemos del posicionamiento oficial por parte de nuestra afiliación y conociendo el sentir o el rechazo que este tipo de movilizaciones pueden causar en gran parte de los trabajadores, debemos hacer un ejercicio de responsabilidad obrera y dejar de lado esos rechazos que podamos sentir por el funcionamiento de los sindicatos convocantes.
Es cierto que los posicionamientos personales respecto a secundar la movilización están condicionados por ese rechazo y no es menos cierto que debemos de poner en la balanza nuestra conciencia obrera para ver que es lo que pesa mas, a partir de ahí, es vuestra decisión, solo tened en cuenta que es una movilización contra la reforma laboral mas brutal de la historia dela democracia y que esta reforma afectara sobremanera a las próximas generaciones de trabajadores, es decir, a nuestros hijos y nietos.
con este argumento y como no podía ser de otra manera, dejamos a vuestra elección secundar o no la movilización, no sin antes dejaros con este texto que hemos recibido del sindicato TUC:
IRE A LA HUELGA. Pero no por los sindicatos, -ni mucho menos por ningún partido político que nos quiere hacer creer que es de los trabajadores-.
Iré por mí y por mis compañeros, esos que estuvieron siempre trabajando con nosotros y ahora resulta que “ya no valen”, por nuestros derechos, por nuestra dignidad como trabajadores.
Iré por los que lucharon antes que yo, por los que se partieron la cara para que ahora tengamos esos derechos.
¿Alguien cree que las condiciones que tenemos (jornadas de 8 horas, vacaciones pagadas, permisos de maternidad, seguridad social, etc.) han caído del cielo y han existido siempre? No.
Estos derechos se conquistaron, uno por uno, y costaron sacrificios y sangre.
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Por respeto a los que lucharon por ellos, no puedo quedarme de brazos cruzados mientras nos los quitan. Y también iré, por supuesto, por los que vendrán después de mí, a los que no quiero tener que explicar en un futuro que ellos viven peor de lo que yo viví, porque fuimos unos cobardes resignados que no quisimos defender lo que teníamos.
29 de marzo huelga general, allí nos vemos…
Por respeto a los que lucharon por ellos, no puedo quedarme de brazos cruzados mientras nos los quitan. Y también iré, por supuesto, por los que vendrán después de mí, a los que no quiero tener que explicar en un futuro que ellos viven peor de lo que yo viví, porque fuimos unos cobardes resignados que no quisimos defender lo que teníamos.
29 de marzo huelga general, allí nos vemos…