En esta empresa, política donde las haya, siempre ha habido
dos formas de que la gerencia de turno te respete;
1º.- Siendo sumisos con la dirección, en el interno de las
reuniones, y aparentando ser ogros hacia esta en los panfletos informativos.
2º.- Siendo igual dentro que fuera independientemente que la
dirección se encuentre más o menos molesta con las actuaciones.
La asignación de una u otra opción la podéis hacer vosotros
con los datos históricos de los que contáis.
En la mayoría de las ocasiones,
las actuaciones de la dirección, ha dependido de directrices políticas y de la
forma de interpretarlas por parte del gerente que esté a cargo de ejecutarlas.
No vamos a entrar en hacer un repaso por las actuaciones y
posicionamientos históricos de ninguna organización, pero si tenemos la “suerte”
de contar con un gerente que respeta las actuaciones profesionales de nuestra organización
a pesar de que muchas de las actuaciones llevadas a cabo ha sido claramente
beligerantes con decisiones tomadas por este.
Con todo esto queremos dejar claros los posicionamientos
respecto a las decisiones en materia de promoción u oposición que está llevando
a cabo la dirección de la empresa y no vamos a ser cómplices, ni por acción u omisión,
de decisiones que puedan contener excesiva carga de subjetividad.
La línea entre participación y servidumbre puede ser, en
algunos casos, tan delgada que quede difuminada hasta el punto que es difícil siquiera
vislumbrar que existe.
En el principio del último proceso selectivo pensábamos que tendríamos
participación activa y con el paso de las sesiones nos dimos cuenta que solo
buscaban meternos en el ajo como aval de una presunta limpieza, limpieza que no
podemos, técnicamente, poner en duda, pero que prácticamente y atendiendo al
grado de interacción que no han permitido si podemos decir sin temor a
equivocarnos que deja demasiadas puertas abiertas a la duda, duda de la que no
queremos ni vamos a ser participes.
A partir de aquí que
cada cual haga las valoraciones correspondientes y bajo sus puntos de vista.
Nosotros no hemos encontrado ningún punto que, jurídicamente, podamos rebatir,
aunque si hemos detectado demasiados puntos donde no existe la transparencia necesaria
que garantice suficientemente defensa a los aspirantes, aclarando que es
siempre nuestra visión subjetiva de
que se podía haber hecho mejor, como en mucho de los puntos propusimos y así
dejamos constancia en las actas y escritos enviados al presidente del tribunal…
Ya hemos comentado en anteriores ocasiones que podemos elucubrar hacia donde ha estado encauzada la convocatoria, pero siempre dejando claro que son solo elucubraciones por extrañas coincidencias acaecidas que en su momento, si lo estimamos oportuno, pasaremos a aclarar.
