De nuevo nos encontramos con la
misma situación en las tres mil viviendas, en el día de ayer sobre las 20:30
horas de nuevo fue apedreado un bus, el 1810 de línea 31 en la calle Luis Ortiz
Muñoz, justo en la parada de regulación que teníamos antes, partiendo tres
lunas del bus, en ese momento el compañero se quedaba vacío, y al ponerse en
contacto con el centro de control, le comunican que siga cargando, comunicando
el compañero que el coche no está útil que los cristales se están cayendo,
llevando tres lunas rotas, y el ya está
fuera de línea, dirigiéndose al Prado para el relevo, a lo que le comunica el
controlador que siga tomando pasaje que el coche de detrás esta a 14 minutos,
el conductor siendo responsable del vehículo y del publico llevo el bus al
Prado para su relevo, donde lo esperaba el supervisor de zona, que pudo
comprobar fehacientemente la versión del conductor, aun así, el controlador le sugirió
al supervisor que volviera a meter el coche en línea, a lo que se negó el
supervisor explicándole que como iba a trabajar con los cristales rotos.
Entendemos que mucho protocolo de
seguridad, pero la al final más de lo mismo, por mucho que nos quiera vender la
dirección de la empresa, se apremia mantener el horario a la seguridad de los
usuarios y trabajadores, incluso no teniendo el vehículo en condiciones de
prestar servicio, tampoco tenemos constancias de que se avisara al resto de
conductores que prestaban servicio en la zona, si no que pretende que siga
tomando público, aun llevando el vehículo no útil para prestar servicio, y
habiendo peligro para la integridad física de usuarios y trabajadores.