Otra feria más, pero una feria un tanto peculiar. En estos años atrás y a pesar de que teníamos un convenio firmado, un gran convenio diríamos, nos encontramos con movilizaciones anuales, algunas coincidentes con la semana grande. Es significativo que todas y cada una de las movilizaciones que tuvimos que plantear fueron motivadas por defender lo que teníamos pactado, defendernos de incumplimientos, imposiciones y cacicadas de esa otra parte que firma acuerdos para luego incumplirlos.
Esta feria, o mejor dicho, este convenio se plantea desde otro prisma de negociación diferente, ya lo hemos dicho, y los acontecimientos que han acaecidos en esta semana nos lleva a pensar que, conociendo a los bueyes, podamos quedarnos con las patitas colgando. Sabéis que el propio Ayuntamiento ha planteado echar abajo el acuerdo que firmaron, utilizando tortuosas estrategias jurídicas, cuando se supone que los acuerdos se firman entre dos partes porque han llegado a ese punto de entendimiento favorable para ambos, además con mandato directo del Alcalde. Ahí no queda la cosa, Lipasam ha firmado un convenio (por solo tres votos en el referéndum) significativamente a la baja, con cuestiones que solo benefician a la empresa y a !!tres años!!. Estos precedentes nos llevan a ser menos optimistas en cuanto al resultado de las negociaciones de nuestro convenio, por tres motivos; Que se retracten, que incumplan, y que posteriormente impugnen.
Queremos pensar que la "bola de cristal" esta averiada y nos anticipa un futuro erróneo, al fin y a cabo no somos expertos en esoterismo, y si lo fuésemos (como el que firmo el acuerdo del Ayuntamiento) tendríamos serias dudas sobre la validez de nuestras premoniciones, !!es que con estos bueyes… ni la adivinación es lo que era!!.
Al margen de esto, queremos felicitar a todos vosotros por la gran labor que, un año más y como siempre, habéis realizado durante esta semana. Seguramente la "periodista" Alvarado y sus secuaces no dedique ni un solo renglón a esta cuestión y por eso mismo hay veces que tenemos que obviar ciertas opiniones cuando se trata de defender nuestra profesionalidad y nuestros derechos.
