jueves, 13 de noviembre de 2025

SIN REVOCACIÓN: RETORNO AL SILENCIO INFORMATIVO

 


Ayer hubo una revocación fallida… ¿había motivos para la misma? Es evidente, a tenor de los hechos, que sí, pero también es evidente que los trabajadores, siempre soberanos, son los que marcan su camino y han decidido abrumadoramente que no. Discusión zanjada, más allá de las futuras cuitas jurídicas de vencedores y vencidos.

Hoy toca analizar someramente el resultado y desarrollo. Los trabajadores, con sus firmas, habían solicitado una asamblea de revocación (un tercio de la plantilla). El comité, desde la Comisión Permanente del mismo y por unanimidad, asumió esa petición y dotó de todo lo necesario que marca la ley para dicha asamblea. Un tercio de la plantilla pide que se vote… lo que, por respeto a esas personas firmantes y a los procedimientos, la totalidad de los 23 miembros del comité deberíamos haber ejercido, reiteramos, por respeto,  el voto. 

Insistimos: lo piden los trabajadores con sus firmas; luego, que cada uno vote lo que estime oportuno… pero solo nos constan votos de ASC.

¿Qué querían los trabajadores que han votado “sí”? Pues mayoritariamente, y por lo sucedido desde las elecciones a esta parte, nuevas elecciones por la gestión de los sindicatos al frente…

¿Son los trabajadores revocados inhabilitados para presentarse a nuevas elecciones? Pues por más que le pueda pesar a algunos, el Estatuto de los Trabajadores y la LOLS son claros al respecto… como lo es el hecho de que, si el objetivo no fueran nuevas elecciones, solo hubiesen revocado a los candidatos de las mayorías. Pero era obvio que lo que aparentemente nace como un movimiento espontáneo de los trabajadores no era más que un camino para obtener representatividad por parte de una organización externa, de ahí el tan cacareado y repetido “todos son iguales”.

¿Por qué no ha habido el mismo número de votos que de firmas para que se dé la asamblea? Esta es la pregunta del millón, pero con una respuesta compleja. Si entramos en el ámbito especulativo… ¿podría ser porque firmaron muchos sintiéndose coaccionados? ¿Podría ser porque firmaron muchos antes de haberse informado? ¿Podría ser porque ha habido una llamada de atención a las afiliaciones en forma de tutelaje sindical? ¿Podría ser por las formas de los promotores?

Sea como fuere, y con el desasosiego de ver cómo se vuelve a gastar en balde una bala, para mayor loa y gloria de un supuesto mesías sindical (otro más), lo cierto es que nos quedamos con que, al menos, esos que, siendo representantes electos, ni han votado a instancia de las firmas de 700 trabajadores, han escrito en 15 días y públicamente lo que ni en un año hubiesen hecho… es decir, se recuperaba el nivel informativo público y multiplural hacia la plantilla. Aunque hoy no han publicado ni una nota pública, ni siquiera el comité de empresa… apenas un escrito de una organización y difundido en foros privados… del resto, silencio.

El resumen: de 1.844 trabajadores con derecho a voto, solo se han movilizado 481. 1.363 no han querido ejercer el voto.

La lectura final es clara: insuficiente para los que esperábamos un cambio y contundente para esos a quienes han refrendado su manera de hacer sindicalismo. ¿Decisión acertada? Democráticamente sí. Efectivamente para los intereses de la plantilla… pues lo decidirá el tiempo.

De los promotores, sin conocer comunicado alguno aún y si se confirman todos los errores de formas y procedimientos incluidos en el acta registrada, aunque no publicada (que tenéis bajo estas líneas), mucho nos tememos que los trabajadores no puedan sacar una lectura muy positiva de ellos a nivel de preparación y asesoramiento técnico-jurídico, dado que los dejaría al nivel de otros sindicatos electos a los que los propios trabajadores han criticado precisamente por eso mismo.