La semana que viene, el miércoles, celebraremos la Asamblea
General de Trabajadores en la que decidiremos las acciones a seguir o a
secundar para intentar echar abajo los decretos y por supuesto para hacer
entran en razón a la empresa para que retome su postura en lo concerniente a la aplicación
de los decretos.
Como dijimos en anteriores ocasiones tenemos que diferenciar
entre la lucha en el interno y la lucha en el externo, la lucha concreta y la genérica,
pero sobre todo tener claro que no se trata de una lucha contra un partido y a
favor de otros….se trata de la lucha obrera contra el sistema opresor neoliberal de los mercaderes….la pregunta que
todos nos hacemos es clara…¿Quién o quiénes son esos mercaderes?...es evidente
que la ausencia de caras visibles e
identificables de estos mercaderes, parte de una estrategia bien
estructurada, hace que la lucha pierda
parte de su motivación y debemos tener en cuenta que esos odiosos mercaderes y
sus vasallos solo se detectan por sus
actos…da igual el partido, empresa u organización a la que representen..Son virus
para los que solo existen dos formas de eliminar….tratamiento genérico de choque….o
tratamiento selectivo y puntual sobre cepas incipientes…
En lo genérico tenemos que trabajar de manera conjunta, las
organizaciones “grandes” que actualmente, por suerte o por desgracia, tienen el
material de acción más potente, deberán eliminar la prepotencia y la imposición
para aglutinar las máximas fuerzas obreras posibles. Las organizaciones que, a
pesar de ser potentes y aguerridas, tenemos un ámbito de acción más limitado,
deberemos actuar desde la más absoluta humildad trabajando por el bien común contra
estos brutales ataques de los mercados.
La conjunción de ambas actitudes por una misma causa es sinónimo
indiscutible de victoria…no hay otra opción en lo genérico…cualquier imposición
de los grandes así como cualquier alternativa impositiva de los menos grandes
es sinónimo de derrota…todo ello sin menoscabo de denunciar públicamente cualquiera
actitud negativa que tenga como objetivo el sacar réditos de cualquier tipo a
costa del sacrificio obrero.
En el tratamiento selectivo tenemos que tener en
cuenta que también es aconsejable la acción conjunta pero no imprescindible y
por ello, ahora más que nunca para eliminar los posicionamientos demagógicos, es
aconsejable que sean los propios trabajadores los que elijan las propuestas de acción…nuestro
posicionamiento siempre estará mas cercano a las acciones contundentes que a
otras más nimias, pero en cualquier caso es importante modular o acomodar las
acciones al momento más oportuno, esa es la verdadera decisión importante.