Hay algunos conflictos candentes en el transporte urbano de varias capitales andaluzas. En concreto Granada y Jerez.
Las empresas privadas concesionarias del servicio son, en Granada Transportes Rober S.A y en Jerez Cojetusa.
Los trabajadores de la empresa Rober en Granada acordaron en Asamblea, continuar con el calendario de movilizaciones previsto, incluso se han planteado iniciar una huelga indefinida “en el caso de que el Ayuntamiento continúe con la política de subcontrataciones del transporte público de la ciudad”
El calendario de paros contempla como jornada de huelga los días 12 de septiembre y coincidiendo con la celebración de los plenos ordinarios del Ayuntamiento los días 24 de septiembre, 29 de octubre, 26 de noviembre y 24 de diciembre. El Ayuntamiento pretende subcontratar lo que ya esta privatizado, mas precariedad aun, varias líneas a Alhambra Bus. Al parecer los vehículos que van a prestar el servicio no tienen acceso para minusválidos, ni aire acondicionado.
Los eventuales de Cojetusa en Jerez , que dejaron de prestar servicios en la concesionaria al pasado 31 de agosto, se han concentrado en las puertas del Ayuntamiento para exigir un transporte público de calidad. El colectivo de trabajadores eventuales asciende a 80 profesionales, de los que la mitad aproximadamente trabajaban unas siete horas a diario y el resto los fines de semana. Los primeros prácticamente vivían de este trabajo y los segundos obtenían una ayuda extra. Desde el día 31 todos ellos han comenzado a arreglar los papeles del paro. Lamentan, según cuenta su improvisado portavoz, José Manuel Venegas, que la empresa no les dijera absolutamente nada y que el comentario que se le escapó a un directivo les pusiera en alerta. "Cojetusa no nos ha entregado ni un papel, no se ha puesto en contacto con nosotros para nada". La razón de ello es que los eventuales son liquidados mes a mes, es decir, cada día 30 ó 31 dejan de prestar servicio y empiezan a trabajar el siguiente.
La mayor parte de ellos lleva entre 12 y 14 años en la compañía, motivo por el que se ubican dentro de esa modalidad contractual tan extendida en la zona como es el fijo discontinuo. Según Venegas, este colectivo de trabajadores se siente víctima del mal servicio público de transportes que padece la ciudad. "Antes los autobuses prestaban servicio hasta las once de la noche y ahora entre las nueve y cuarto y las nueve y media ya han terminado. Además, han quitado seis autobuses de las calles respecto al año pasado. Todos esos recortes lo que hacen es quitar empleo y nosotros somos las víctimas".
Pero hay muchas más víctimas colaterales del conflicto de los autobuses urbanos. "La repercusión de un mal servicio es enorme", apunta el portavoz de los eventuales. "La plaza de abastos sufre si hay un mal servicio, el sector comercial de la ciudad se resiente, la gente deja de moverse y se queda en casa y eso es nefasto".
Uno de los principales objetivos de los trabajadores eventuales de Cojetusa es que la nueva empresa que se haga cargo de la concesión subrogue a los empleados, es decir, vuelva a contar con ellos para desarrollar el servicio.
La mayor parte de ellos lleva entre 12 y 14 años en la compañía, motivo por el que se ubican dentro de esa modalidad contractual tan extendida en la zona como es el fijo discontinuo. Según Venegas, este colectivo de trabajadores se siente víctima del mal servicio público de transportes que padece la ciudad. "Antes los autobuses prestaban servicio hasta las once de la noche y ahora entre las nueve y cuarto y las nueve y media ya han terminado. Además, han quitado seis autobuses de las calles respecto al año pasado. Todos esos recortes lo que hacen es quitar empleo y nosotros somos las víctimas".
Pero hay muchas más víctimas colaterales del conflicto de los autobuses urbanos. "La repercusión de un mal servicio es enorme", apunta el portavoz de los eventuales. "La plaza de abastos sufre si hay un mal servicio, el sector comercial de la ciudad se resiente, la gente deja de moverse y se queda en casa y eso es nefasto".
Uno de los principales objetivos de los trabajadores eventuales de Cojetusa es que la nueva empresa que se haga cargo de la concesión subrogue a los empleados, es decir, vuelva a contar con ellos para desarrollar el servicio.
Esto es lo que trae la privatización que pretenden los Monteseirin, Fran fernandez, Alfonso Mir, el hermanísimo de un jefecillo sindicalista en CASAL.
Esto es lo que con la lucha hemos evitado de momento los trabajadores de TUSSAM.
La próxima meta está, de momento, en la primavera del año que viene