No es una frase hecha o escogida de otros escritos, es solo y exclusivamente una metáfora con tintes adivinatorios. Decimos esto por las insistentes noticias que aparecen en torno a privatizaciones de servicios esenciales como el transporte o la limpieza (http://www.cincodias.com/articulo/empresas/grandes-grupos-transporte-autobus-abren-puja-EMT/20090307cdscdiemp_1/cdsemp/ )
Es claramente significativo que los gobernantes más conservadores indiquen que las dificultades de una privatización de servicios públicos conllevan más problemas que el mantenimiento, gestión y explotación del los mismos de manera directa, especialmente por lo que a ellos concierne, que suele ser lo de siempre, mantener servicios sociales económicamente poco rentables.
En nuestra ciudad podemos tener el ejemplo de lo contrario, es decir, un gobierno progresista que propone a los directivos de la empresa municipal de transporte, que realicen una gestión de empresa privada ¿lógico? Evidentemente en términos contables y de productividad pura y dura, sí, pero ¿Qué hay del empleo de calidad, de la calidad del servicio o de las jornadas de conducción segura para los usuarios? En este asunto es donde, además de los trabajadores, los usuarios tienen la última palabra y podemos preguntarle a los más cercanos, a los usuarios de la líneas concesionarias, que pueden determinar si el servicio que tienen es, en lo que a calidad se refiere, cercano al que ofrece nuestra empresa en el resto de las líneas ¿imagináis un medico operando en una sala durante doce horas, sin asepsia y sin ningún tipo de control? Este es un ejemplo, quizás extremo, pero tenemos que hacerlo si queremos hacer llegar el mensaje de manera pragmatica, con todo su contenido y trasfondo, pensadlo.
Como segunda parte de ese título, queremos deciros que el segundo Lobo tiene que salir trasquilado y para eso tenemos la necesidad de que vosotros, la plantilla, seáis conscientes y no se dejéis llevar por cantos de sirenas interesados que solo buscan un objetivo, debilitar a los trabajadores. Está claro que la coyuntura es la que es y precisamente ese escenario es el que barajamos, es tudiamos y asumimos pero, ni mas, ni menos, otras lecturas mas catastrofistas son solo cantos al sol….¿no creeis?...