miércoles, 20 de julio de 2022

AMARILLISMO SINDICAL Y SUMISIÓN VOLUNTARIA

 Durante los últimos días hemos estado recopilando una suerte de conceptos sobre los que basar escritos de pedagogía sindical sustentados sobre hechos reales en acaecidos en nuestra empresa…hoy vamos por otro que, si bien no está en la línea de los pecados  capitales obreros, si está en la línea del desenmascaramiento de determinadas actuaciones antisindicales del sujeto a una nariz pegado, como diría en su soneto el gran Quevedo…nuestro gerente.

Primero vamos al concepto; ¿Qué es el amarillismo?... El sindicato amarillo es un tipo de organización sindical que, en vez de defender y proteger a los trabajadores, tiene como objetivo principal velar por los intereses de la empresa…¿os suena?.

Hay dos tipos de sindicatos amarillos; los creados directamente por la empresa y los creados por los trabajadores pero que después ha sido controlado por los empleadores…este último os sonara mas…!ojo!...controlado por los empleadores

Algunos hemos llegado a pensar…¿Cómo es posible que una estructura sindical nacional permita que un empleador controle una sección sindical?...pues, sencillo; Para tener influencia a nivel nacional se necesita tener una cuota de representatividad a determinado nivel y eso se consigue teniendo más afiliados… a mas afiliados, mas influencia y en definitiva, más dinero…más subvenciones…eso a cambio de un reino de taifas para el conseguidor…lejos quedaron los idearios, una vez más, el fin justifica los medios…ya en su momento cambiaron de siglas para quedar se con el patrimonio histórico anarquista y acceder al que llamaban pesebreo del sistema…muy pulcros ellos.

Aclarado el porqué del silencio cómplice de sus estructuras a cambio de un puñado de dólares, del porque prestan sus sedes para fiestas cerveceras de captación y el porqué dejan que se plieguen al chato, que es lo que vale para ellos la clase obrera, centrémonos en el amarillismo como tal, pero en Tussam.

Haciendo una crónica retrospectiva sobre la historia de Tussam, podemos encontrarnos situaciones similares en años pretéritos y con otras organizaciones, claro que por entonces la sumisión sindical alcanzaba solamente a la velocidad en el crecimiento de los derechos obreros, es decir, crecíamos poco y lento, pero al menos crecíamos…que es consuelo de tontos viendo como en los últimos cuatro años, no solo no hemos crecido, sino que hemos crecido poco y además sobre la base de lo que le interesa a la empresa, no a los trabajadores (véanse programas electorales y plataformas de convenios varias).

Volviendo al tiempo actual y al amarillismo, no cabe duda de que el gerente está detrás de las practicas amarillistas…es imposible que una empresa pública regale horas sindicales de sustitución de un presidente que no quiere reconocer el reglamento de funcionamiento para así poder servir útilmente a su násico amo, pero que precisamente se base en dicho reglamento para dárselas…¿prevaricación?...es cuasi obvio que por ahí van los tiros, sobre todo cuando la empresa se niega a contestar a nuestros escritos al respecto y cuando el convenio recoge el método para ello, que no es el aplicado.

Ya vimos como en el referéndum del convenio los cuatro sindicatos fueron sentados a modo de interventores (unitarios, como si de una sola organización se tratase) en las urnas y sin que apareciesen dichas liberaciones en los estadillos…lo que pone de manifiesto que en cualquier momento cualquiera de los tres tienen “cimientos morales” suficientes para ser la cortesana favorita del amo…y lo que es peor, ponen a los trabajadores como vulgares prostitutas para uso y disfrute de este y sus más bajos instintos…

Algunos ahora dirán que estamos llamando prostitutas a los trabajadores, cuando en realidad estamos llamando “chuloputas” a las cortesanas sindicales, especialmente a la cortesana presidenta…eso sí, ejercer sumisamente la prostitución obrera es una decisión personal de cada trabajador y para nosotros la libertad está por encima de todo, hasta para eso…aunque nuestra obligación ética es de la ejercer la labor pedagógica de comunicar lo que está pasando…a partir de ahí; TU DECIDES…Y TU ASUMES LAS CONSECUENCIAS.

PD: De seguir así, corremos el riesgo que, al igual que las cortesanas, la dilatación “mental” sea tan grande que el uso de lubricación ideologica  del amo se considere ya irrelevante… y puede incluso que la brutalidad de las embestidas se  conviertan en una placentera sensación…evidentemente a modo retorico sin connotaciones sexuales, porque después de escribirlo y repasarlo, da la sensación de que estamos hablando de tendencias sexuales extremas.