Hoy se nos ha presentado el Plan Formativo y la memoria de los años anteriores.
Después de lo ocurrido en la jornada de ayer con la CMP, no nos sorprendemos con determinados datos, teniendo un modelo cicatero de gestión que acomete robos a mano armada a los trabajadores, sobre todo en materia social, y especialmente a los conductores.
Los datos no dejan lugar a dudas. La formación actual fue organizada por Torreglosa y ha llevado un crecimiento claro hasta 2017, para caer en picado desde este año, a pesar del esfuerzo de los esponsables del departamento de Formación.
Cuando decimos que se está discriminando a los conductores, podemos ponerlo de manifiesto con un solo dato: talleres ha recibido el triple de horas de formación que los conductores, es decir, los conductores hemos recibido una formación por conductor respecto a las tres formaciones por cada compañero del taller. Es evidente que no estamos en contra de tener personal formado, además de cualificado, en talleres, algo que supuestamente tendría que redundar en una disminución de las averías.
En el año 2018 hemos caído en participación del entorno de 700 trabajadores y la empresa se ha ahorrado sobre 200.000€ , que si lo sumamos a los mangazos en materia organizativa y retroactividad, resulta que el abuso social de la empresa se torna casi “fascinante”, teniendo en cuenta que hemos bajado en torno al 20% las inversiones respecto a años anteriores pasando de invertir más del 1% del gasto de personal al entorno del 0,8%, lo que dice todo sobre la política de recortes sociales de la empresa y que, como hemos dicho, se ceba especialmente en el colectivo de conductores, que ha crecido en número y disminuido proporcionalmente en la formación que se le da.
Estos datos, que podríamos ofrecer utilizando otros parámetros, como grupos, etc., nos arrojan el mismo resultado lo tratemos como queramos tratarlos, dándonos siempre el mismo resultado negativo.
También sorprende sobremanera que más de la mitad de inversión en formación se dedica a formación obligatoria, como Prevención, por lo que resultaría engañoso decir que somos una de las empresas con mayor porcentaje de formación, cuando la realidad es que la formación al margen de la obligatoria es prácticamente irrisoria.
Tenemos que destacar la formación inicial a los conductores de nueva incorporación en 2017, en la que la cicateria se ha traslucido en un aumento de los incidentes de los compañeros de nueva incorporación. Está claro que meter a treinta personas en un bus para formarlas en las particularidades del trabajo en Tussam , no es lo más adecuado, pero como hemos dicho; a ahorrar toca...especialmente en materia social.
A preguntas al Gerente respecto de la reducción de dicha formación, resulta que la respuesta se argumenta sobre la base de falta de personal, lo que nos deja claro que se prefiere mantener el servicio en aras de servir fielmente al Alcalde, a pesar de que este maltrata clara y cínicamente a los trabajadores de esta empresa, en vez de reducir el servicio para mantener adecuadamente formados a los trabajadores, especialmente a los conductores que somos los que trasladamos directamente al usuario la imagen de la empresa.
Respecto al año que viene, ya se nos anticipa que a pesar de que se nos traslade una memoria una con determinada formación, nos dejan claro que seguramente dicha formación no se cumpla...sin comentarios.
Cerramos. Con estos datos se pone de manifiesto que la empresa vuelve a trabajar bajo criterios exclusivamente economicistas y antisociales invirtiendo la tendencia que traíamos desde 2012 y que nos retrotraen a modelos de gestión que imprime una clara involución a nuestra empresa, involución acorde con las capacidades directivas de las que se dispone...por poner un dato final, decir que el número de acciones antisociales como estas son directamente proporcionales al número de sanciones impuestas en este último año, dejando de manifiesto que el estilo no es el más adecuado, dato que además indica que mientras que la empresa se ha mantenido social y económicamente moderna, hemos podido mantener formados a los trabajadores y hemos tenido menos conflictividad en materia disciplinaria,,,sin comentarios...¿y los dirigentes que permiten esto se permiten el lujo de acusar a determinadas formaciones políticas de fascistas?...se ve que el hábito no hace al monje