COMO SE DICE EN EL TEXTO, NUESTRA EMPRESA REQUIERE DE MEDIDAS DISRUPTIVAS PARA QUE SE ADAPTE A LOS NUEVOS TIEMPOS...CLARO QUE PARA ELLO ES IMPRESCINDIBLE CONTAR CON DIRECTIVOS CON CAPACIDAD, POR ACTITUD Y APTITUD, DE ADAPTACIÓN Y POR SUPUESTO CONTAR CON UN PLAN ESTRATÉGICO DE DIRECCIÓN QUE REALMENTE BUSQUE ESTA MODERNIZACIÓN.
En este contexto, el departamento de Recursos Humanos requiere, ahora más que nunca, una transformación profunda en sus funciones y herramientas, para que pueda contribuir a que las organizaciones se adapten a las necesidades de estos clientes, tanto de los actuales como de los futuros. Si se quiere llegar a ellos, hay que conocer su estilo de vida, lo que quieren y lo que necesitan, o mejor dicho, lo que valoran.
Esto sólo es posible transformando la organización, digitalizándola e incorporando talento joven que comprenda y ayude a la organización a entender su forma de vida, cambiando las estructuras para que sean más ágiles y al ritmo que los clientes demandan. Para ello hay que movilizar la organización, cambiar su cultura creando nuevas formas y estilos de hacer las cosas, y ser innovadores y creativos. La transformación tiene que realizarse de forma orgánica para que realmente sea eficiente, y además debe conseguirse en el mínimo tiempo posible.
Los Recursos Humanos tienen un rol muy importante como impulsores del cambio interno que debe reflejarse en el mercado. Es necesario definir una estrategia, pero actualmente no puede realizarse con proyectos a largo plazo. Así, estamos en un momento en el que el departamento de RR.HH. debe ser creativo e innovador, y sus planes y herramientas han de ser disruptivas. Los RR.HH. deben de ser los primeros en crear una nueva consciencia de trabajo y predicar con el ejemplo. Pedimos a los departamentos de innovación, marketing o comercial que sean creativos e innovadores y.... ¿al departamento de RR.HH.?
Esta área de la organización juega un papel importante, fundamental en esta transformación empresarial. Ha llegado el momento de que sea parte activa del negocio contribuyendo a crear los mejores profesionales que den lo mejor de sí mismos. Esto empieza por un cambio de concepto: los humanos no son recursos, son personas que ponen su talento a disposición de la organización. Hay que definir estrategias innovadoras y, sobre todo, actuar, actuar, y actuar realizando proyectos, actividades, acciones que provoquen la movilización y sensibilización de las personas de la organización hacia esta nueva revolución, donde el conocimiento y talento son el principal activo de las empresas. Parafraseando al célebre autor Peter Drucker, considerado el mayor filósofo de la administración del siglo XX, cuando la tecnología, los procesos y las estrategias son iguales, lo que marca la diferencia son las personas.