Fragmento del libro de Benito Pérez-Galdós "la fe nacional y otros escritos sobre España" publicado en 1912.
"los dos partidos que se han concordado para turnarse pacíficamente en el poder son dos manadas de hombres que no aspiran más que a pastar en el presupuesto. Carecen de ideales, ningún fin elevado los mueve; no mejorarán en lo más mínimo las condiciones de vida de esta infeliz raza, pobrísima y analfabeta. Pasarán unos tras otros dejando todo como hoy se halla, y llevarán a España a un estado de consunción que, de fijo, ha de acabar en muerte. no acometerán ni el problema religioso, ni el económico, ni el educativo; no harán más que burocracia pura, caciquismo, estéril trabajo de recomendaciones, favores a los amigotes, legislar sin ninguna eficacia práctica, y adelante con los farolitos... si nada se puede esperar de las turbas monárquicas, tampoco debemos tener fe en la grey revolucionaria (...) no creo ni en los revolucionarios de nuevo cuño ni en los antediluvianos (...) la España que aspira a un cambio radical y violento de la política se está quedando, a mi entender, tan anémica como la otra. Han de pasar años, tal vez lustros, antes de que este régimen, atacado de tuberculosis ética, sea sustituido por otro que traiga nueva sangre y nuevos focos de lumbre mental"……………………………………………
tendremos que esperar como mínimo 100 años más para que en este tiempo "si hay mucha suerte" nazcan personas más sabias y menos chorizos de los que tenemos actualmente.... ¡pobres españoles! lo que nos costara recuperar lo perdido”.
No
cabe duda de que esta reflexión mantiene, 101 años después, la misma frescura
que cuando se confeccionó.
Es
cierto que en ningún momento se entra en el fondo o al menos no se analiza ni
el origen de esta sinvergonzonería, ni a los cómplices indispensables para que
todo esto siga sucediendo.
Los
dos grandes tapados de esta situación son los verdaderos culpables y como nexo
de unión la más alta de las miserias humanas que existe…la avaricia.
En
un símil religioso, nadie tiende a ver al diablo como culpable de la maldad,
simplemente es la maldad, por lo tanto se supone que hace solo su trabajo. Los
empresarios no son juzgados por hacer de serpientes y ofrecer la manzana a las “Evas”
(políticos elegidos por el pueblo), al contrario, como en el relato bíblico se
tiende a culpar a Eva por dejarse embaucar…hasta aquí bien….pero…¿En que estaba
pensando Adán para no impedirlo?...está claro que Adán (el pueblo) no quiso
hacer demasiado esfuerzo en impedirlo y simplemente acepto el castigo impuesto
por algo que le vino dado por la debilidad y avaricia de terceros.
No
cabe duda que el diablo hizo su trabajo, pero si caben muchas dudas sobre la actuación
de Adán, aunque en su descargo podríamos utilizar la falta de otras “Evas”
donde elegir…Si Adán hubiese podido elegir….¿tendría Adán que haber aceptado el
castigo?...¿tendría que haberse buscado a otra Eva?...¿Hubiese elegido una
hermana de Eva a la que se conoce las mismas “cualidades” que a la
susodicha?...
Está
claro que este relato podríamos aplicarlo a todos los ámbitos sociales y políticos,
es de aplicación genérica hacia todo lo cotidiano, es la antítesis del
pensamiento revolucionario, de la lucha, de los principios y de cualquier cuestión
que exija un mínimo de esfuerzo mantenido en el tiempo….esa falta de espíritu solidario
y de la excesiva tendencia a la búsqueda de un ideario de lo ocioso por encima
de otro modelo con unos mínimos de deberes no escritos, es decir, de ideales y convicción
de llevarlos a la práctica nos han convertido en los que somos….borregos que se
creen los amos de la montaña.
Una guerra nos costo, también
una dictadura de 40 años, pero nos llevo a la regeneración como sociedad, al
compromiso, a la libertad…lástima que el empeño en aborregar, por parte de los
que hubiesen tenido que ser los principales guardianes de esos magníficos bienes
que son “los ideales” , nos ha traído a un estado sospechosamente similar al de
los años previos a la Segunda República…todavía podemos intentar no caer en el
mismo error de entonces y que la Tercera República sea una realidad con solución
de continuidad en vez de un bucle peligrosamente reiterativo….sobre todo hay
que pensar que los votos de castigo son votos de auto castigo…no castigues…educa.