En el día de ayer se celebró el acto de conciliación en el SERCLA,
sobre los conflictos Colectivos planteados por ASC (a los que de momento no se han sumado ningún sindicato, a pesar de
nuestra invitación, y sin tener constancia de otros, que dicen se han
presentado, a los que adheridnos si tienen fundamentos de derecho diferentes,
no nos duelen prendas, el objetivo debería ser el mismo) con el resultado
esperado a tenor de que la empresa ni siquiera ha convocado a la Comisión
Paritaria, que lo mismo la convoca para ellos, SIN AVENENCIA.
Parece ser que no somos los primeros en denunciar esto,
aunque si los primeros en el ámbito de nuestra empresa, dado que otro sindicato
lo denunció en el Ayuntamiento de Umbrete, cerquita, y lo ha ganado.
Como no puede ser de otra manera nos congratulamos de este
hecho, dado que es un triunfo para los trabajadores, independientemente quien
lo denuncie, lo que nos extraña es que en puertas de una Huelga General por la derogación
de estos decretos no exista aún ninguna otra denuncia conocida, aunque creemos
que debe de existir, que no se den incoherencias por parte de algunos. No
queremos ser mal pensados e imaginar que lo han retrasado para que el acto de “conciliación” se realice más cerca del
día de las elecciones, lo que sería anteponer los intereses electoralistas a
los intereses generales de los trabajadores, aunque tampoco nos sorprendería esta
maniobra o incluso que ni siquiera lo hayan presentado, pero ese no es nuestro
problema.
Lo que nos trae ahora es que en definitiva, los trabajadores,
tenemos toda la razón y que ningún gobierno puede legislar, por mucha mayoría que
tenga, de manera dictatorial y alejado de los principales principios de
derecho, afortunadamente los poderes están separados precisamente para mantener
la independencia de los jueces, un detalle que quizás los gobernantes
nacionales han minusvalorado de manera inconsciente.
Sea como fuere tenemos una sentencia que pone a cada uno en
su sitio y que, al igual que los cinco minutos, pondrá a cada uno en su sitio.
Como en las cuestiones con la anterior gerencia, los
posicionamientos de ASC quedan de manifiesto con sentencias y perseverancia,
cuestiones que chocan con el electoralismo y que aclara aun más que nuestra organización
antepone los intereses generales a los fuegos artificiales, eso sí, repetimos a
los que hagan del espectáculo su razón de ser, no somos nadie para juzgarles,
el día 22 no es mal día para que los trabajadores lo hagan.